Como toda publicación al revisarla, se encuentran una serie de erratas fruto de la propia edición del libro, lo que algunos llaman "duendes de imprenta", y nuestro libro "La Natación en Canarias" no ha podido escapar a esa situación.
Por eso, adjuntamos un documento donde damos fe de esas erratas como aclaración para los que han podido adquirir el libro, cosa que agradecemos y pedimos disculpas por esas erratas.
file:///C:/Users/rafa/Desktop/Fe%20de%20erratas%20La%20natación%20en%20Canarias%201.pdf
jueves, 3 de diciembre de 2015
domingo, 27 de septiembre de 2015
Los primeros paralímpicos de Canarias.
Foto: Diario de Las Palmas
Los Juegos Paralímpicos ya han
alcanzado su máxima cota de prestigio y popularidad, lejos ya de aquellos
comienzos en los años sesenta cuando la idea del médico alemán Ludwig Guttmann
de buscar una competición de alto nivel, equivalente a los Juegos Olímpicos,
para personas con alguna discapacidad se materializaba con los legendarios
Juegos de Stoke Mandeville, lugar dónde radicaba su clínica y que estaba orientada básicamente
a los heridos de la Segunda Guerra Mundial y aunque hubo presencia en Londres 1948 y
Helsinki, 1952, se considera Roma 60 el punto de partida de los actuales Juegos
Paralímpicos,.
Como inicialmente se basaba en
heridos de guerra, poco a poco se fueron creando asociaciones y organismos para
atender a otras personas con discapacidades que no fueran militares y así en
nuestro país se creaba la ANIC, la Asociación Nacional de Inválidos Civiles, que en aquellos años acogió a este colectivo.
Como no podía ser de otra manera
el deporte y mas concreto la natación se consolidaban como uno de los elementos
mas importantes dentro de estos Juegos Paralímpicos, como así ha sido y sigue
siendo y en este caso Canarias y en concreto Gran Canaria no quedo atrás.
Las piscina “Julio Navarro” se
convertía en el epicentro de la actividad de este colectivo y ya sonaban
nombres que alcanzaban reconocimientos nacionales e internacionales, como es el
caso de Juan Francisco Gopar, que fue un destacado campeón de España y que tomo parte en varias
competiciones internacionales recibiendo premios y honores como mejor
deportista a nivel regional y a nivel nacional, siendo nombrado Mejor
Deportista Nacional en 1971.
Junto a Gopar, que se había
iniciado en la natación en el Club Victoria de la isleta, junto a su hermano
Carmelo, el se formó un equipo dentro de
la Federación Provincial de Deportistas minusválidos, que presidia Domingo
Caballero y que alcanzaba altas cotas de éxito a nivel nacional como fue el
Campeonato de España de 1975, pero ya lo había sido en los años anteriores, con
superioridad manifiesta.
Fuente: Diario de Las Palmas
El equipo de Las Palmas estaba formado
por José Francisco Tejera Trejo, Francisco Rodríguez Trujillo, Juan F. Gopar
Rodríguez y Mauricio Rodríguez González, en masculinos y por Dulce María
Henríquez Umpiérrez, Isabel Domínguez Santana y Enma Rosa Dorta Martín.
Unos pioneros, que además estaban
plenamente integrados en los clubes de natación, entrenando y compitiendo con
el resto de los nadadores sobre todo de la Sección de Natación de la Unión
Deportiva Las Palmas o del Victoria, cumpliendo así con unos de los importantes
objetivos del deporte para estos colectivos: la plena integración
Ahora son otros los nadadores y nadadoras que pasean el nombre de Canarias por el
mundo, en los Juegos Paralímpicos o en la otra cita importante, los Special
Olympics, pero sería bueno reconocer el esfuerzo y la aportación que hicieron
estos pioneros del Deporte para Todos.
lunes, 14 de septiembre de 2015
Gran Canaria, pionera en los Saltos de Gran Altura.
Fue sede del primer Campeonato del
Mundo en 1988
Las dos últimas ediciones del Campeonato del Mundo de Natación, organizados por la FINA (Federación Internacional de Natación), han puesto de relieve una modalidad de Saltos, los de gran altura, que han sido todo un éxito a tenor de lo visto, etiquetándose como los primeros campeonatos del mundo de la especialidad y a Barcelona’2013 como el punto de arranque.
Pero en realidad la historia y la
hemeroteca nos dice otra cosa, y es que en esto de los saltos de gran altura se
reconoce que tuvieron su punto de origen en los legendarios clavadistas de
Acapulco en la costa del Pacifico mexicano, en la famosa Quebrada, que dio
origen a estos arriesgados saltos desde alturas que llegan a los 45 metros
aunque eso sí, jugando con la cadencia de las olas, y que fueron famosos a lo
largo del siglo XX, a partir del año 1934 que es reconocido como el punto de partida.
La resonancia internacional no
cabe duda que vino de la mano de la famosa Red
Bull Cliff Diving World Series a partir de los primero años del siglo
actual (2009), sobre todo por la utilización de una amplia lista de escenarios
naturales a lo largo del mundo.
De ahí al campeonato del Mundo de
Barcelona, todo fue un paso, pero en honor a la verdad, no fue el primero que se disputaba en nuestro
país, ese honor le corresponde a Gran Canaria, que a finales de la década de
los ochenta del siglo pasado (1988), era sede del primer Campeonato del Mundo
de Saltos de Gran Altura.
En septiembre de aquel año, es
decir hace ahora 27 años, y según podemos leer en la prensa de la época (La
Provincia, Diario de Las Palmas y Canarias7), la zona costera de El Puertillo en
Bañaderos, era escenario de las evoluciones arriesgadas de 14 saltadores de
países como Canadá, Estados Unidos, e Italia, desde alturas de 25-30 metros y
que era la tercera cita del el citado campeonato mundial, después de las dos
primera que se diputaban en Italia (Telese y Malcesine, que ha continuado
siendo sede de la Red Bull).
La competición fue organizada por
la denominada Federación Europea de Deportes del Mar (FEDEMAR), que presidia Andrés Vallés y conto con el apoyo del Ayuntamiento de
Arucas y sobre todo el Cabildo Insular de Gran Canaria, de la mano del Dr. José
Antonio Ruiz Caballero, en aquellos años consejero de deportes de la entidad
insular y cuyo apoyo fue fundamental.
Hubo que instalar una plataforma de
25 metros de altura que tuvo sus más y sus menos, por la falta de experiencia,
pero al final todo fue un éxito y el norteamericano Bob Brown se proclamaba
campeón del mundo al igual que su equipo, USA. Los canadienses Mitch Geller y
Scott Graham le acompañaron en el podio, eso sí, teniendo en cuenta la ausencia
de las estrellas del momento, los saltadores mexicanos que estaban en los Juegos Olímpicos de Seúl, pero asi y todo, constituyó todo un éxito
deportivo y de público que se agolpó en los alrededores para no perder detalle.
Pero ahí no acabó todo porque el
campeonato formaba parte de un ambicioso programa que se denomino Semana de
Actividades de esa Federación Europea de Deportes del Mar y contó, además con exhibiciones
y demostraciones, como fue la intervención del legendario campeón del mundo de
Apnea, Stefano Makula, que intentó y batió el record del mundo de apnea en
longitud que en aquellos momentos el mismo poseía con 111 metros y que superaba
en la playa de las Canteras y así quedo para la historia, dejándolo en 125
metros (9 settembre 1988- Las Palmas
(Canarie)- 125 m).
Además, hubo exhibiciones de
paracaidismo, y el propio Makula impartía un curso en el Metropole y en un
hotel en Playa del Inglés, en una demostración evidente del magnífico escenario
que significan las islas y en concreto Gran Canaria, para los deportes
acuáticos y de litoral y por esa tradición deportiva que existe en nuestra
tierra.
Es importante que la FINA haya rescatado los Saltos de Gran Altura, y que precisamente haya sido Barcelona el punto de partida, pero “al César lo que es del César” la pionera en nuestro país en esta modalidad deportiva es, sin duda, Gran Canaria, y no olvidemos que, precisamente, el único saltador español de la especialidad es canario, Carlos Gimeno.
sábado, 20 de junio de 2015
LA NATACION MASTER: LOS ORIGENES EN GRAN CANARIA
Los Máster son en realidad, como ocurre en
otros muchas disciplinas deportivas, un deporte de veteranos, es decir, una
actividad para permitir que las llamadas “viejas glorias” pueden seguir
practicando su deporte favorito a pesar del paso de la edad. Esto
fue así en un principio y muchos de los antiguos nadadores volvieron a pasar
por las piscinas para mantenerse en forma, para recordar viejos tiempos y para
volver a ver a los colegas y amigos de antaño, más o menos por ese orden.
Precisamente, el punto de partida para
muchos en Gran Canaria, fue un acto solidario que se organizaba en el Metropole
en 1989, para recordar la triste y prematura desaparición de un amigo de la
natación local, Sergio el marido de Nancy Fleitas y padre de los saltadores
Oliver y Yeray. Además coincide en el tiempo con el nacimiento y
“explosión” del movimiento máster a nivel nacional ya que se convoca el primer
Campeonato de España en Sabadell en julio de 1990, de la mano de uno de su
grandes impulsores, Josep Claret, el que fuera recordado como gran entrenador
entre otros del Club Natación Manresa, con figuras, entre otras de Neus
Panadell y que ahora había fundado el C.N.Nagy.
El año 1992 había sido el del pistoletazo
de salida para la categoría, con la organización del ”I Campeonato
de Canarias de Natación para Veteranos” que fue su denominación oficial, y que
convocó a muchas viejas glorias de la natación local que se animaron a recordar
viejos tiempos y “camaradas”, en las instalaciones del Club Natación
Metropole, en su piscina de 25 metros, con participación de más de medio
centenar de deportistas que “dieron un inusitado colorido a una competición,
cuyo único objetivo: conseguir animarlos a participar, se cubrió con creces”. (DLP, 25/5/1992). Ese era el objetivo y
los veteranos lo cumplieron, una conjunción de figuras que provocó más de una
nostalgia.
El año 1992 había sido el del pistoletazo
de salida para la categoría, con la organización del ”I Campeonato
de Canarias de Natación para Veteranos” que fue su denominación oficial, y que
convocó a muchas viejas glorias de la natación local que se animaron a recordar
viejos tiempos y “camaradas”, en las instalaciones del Club Natación
Metropole, en su piscina de 25 metros, con participación de más de medio
centenar de deportistas que “dieron un inusitado colorido a una competición,
cuyo único objetivo: conseguir animarlos a participar, se cubrió con creces”. (DLP, 25/5/1992). Ese era el objetivo y
los veteranos lo cumplieron, una conjunción de figuras que provocó más de una
nostalgia.
En categoría «A», los más jóvenes, como Jorge del Corral, Guillermo García, Luis Martínez y los más veteranos en las categorías «F» y«G», como Asdrúbal Ojeda, Miguel Alvarez y Antonio Santana.
Junto a ellos, otras recordadas figuras como Manuel Suárez, Arturo Lang-Lenton, José Baixas, Daniel Orejas, José A Suárez, Arístides Jaén, Luis F. González, Guillermo Martinón, Francisco Rodríguez.
En las féminas, las hermanas
Machado, Lidia y Mary Carmen, Teresa Devesa, Fátima Campos, Pino Mary Cruz,
Encarna Tirado, Mavira Santandreu y Marisa Bonal, y en las más
veteranas, destacar a Rita Pulido, Nancy Fleitas y Carmen Blanco.
En braza, Ely Mary Ramos,
Ana Ojeda, Nancy Fleitas, Pilar Gallego, Ana Gallardo, Gregorio
Martínez y Javier Medina.
En mariposa los hermanos Lang-Lenton, Arturo y Miguel, Celso González y en féminas, Blanca López..
En espalda, Pino Mary Cruz, Gloria Sánchez y María Lang-Lenton, José Blanco, Guillermo García, Sebastián Arocha, José Gómez, José Rodríguez, Rafael Reyes.
En 100 libres, Celso González, José Baixas, Antonio Arriaga y Juan M. Winter.
En estilos Arístides Jaén, José. Blanco, José Baixas y Rafael Machado. Ely Mary Ramos, Fátima Campos, Saro Lang-Lenton, Pilar Gallego y Carmen Blanco
En mariposa los hermanos Lang-Lenton, Arturo y Miguel, Celso González y en féminas, Blanca López..
En espalda, Pino Mary Cruz, Gloria Sánchez y María Lang-Lenton, José Blanco, Guillermo García, Sebastián Arocha, José Gómez, José Rodríguez, Rafael Reyes.
En 100 libres, Celso González, José Baixas, Antonio Arriaga y Juan M. Winter.
En estilos Arístides Jaén, José. Blanco, José Baixas y Rafael Machado. Ely Mary Ramos, Fátima Campos, Saro Lang-Lenton, Pilar Gallego y Carmen Blanco
Diario de Las Palmas, 25/5/1992.
En 1993, encabezados por el gran nadador
Toni Quevedo que había sido designado delegado federativo para los máster, se
hace oficial otros núcleo de inquietud en Gran Canaria, precisamente en el Real
Club Victoria, cuyo presidente, Juan Armas acepta en 1992, la propuesta de
crear una Sección de natación Máster en el club de Las Canteras.
El grupo de nadadores de la playa era en
realidad un colectivo de veteranos que se habían quedado en la playa y no
habían ido a las piscinas, y ahí nacieron dos grupos, el de los
Amigos de La Peña la Vieja, con gente como Vicente García y su hermano Juan al
frente y los de la A.V, La Barra que organizaba Pacuco Bello. Los de
La Peña la Vieja además formaban parte de un compromiso entre deportistas que
databa del año 1950 y que debían nadar cada primer domingo de octubre dese la
Puntilla a la Peña la Vieja.
Pero sin duda alguna el verdadero
catalizador de la actividad en este colectivo, fue el recordado amigo Paco
Reyes, una indiscutible entusiasta de todo lo que representara a la natación,
catalizando toda la actividad que allí se llevaba a cabo, tanto travesías como
campeonatos en piscina y desplazamientos como el que hicieron a Tenerife para
nadar en la travesía al Puerto de Santa Cruz junto con Fayna Pírez,
Antonio Manchado, Luis Domínguez y Eduardo López y además editaba
hasta un “Boletín de Nadadores Máster del Real Club Victoria, para informar de
todos los pormenores de la actividad, ya sean competiciones,
desplazamientos, tablas de records, etc., y junto con otros amigos como
los ya mencionados, sobre todo Luis Domínguez, (Wiso para los amigos) y su
hermano Julio, dieron vida a una idea que si en un principio pareció
descabellada, con el tiempo se ha convertido en todo un referente que ha
crecido de manera imparable: la Travesía a Nado Lanzarote-La Graciosa, cuya
primera edición tuvo lugar en septiembre de ese año.
Y ese mismo año se organizaba el
Campeonato provincial en el Metropole, antesala de la primera participación
canaria en unos nacionales y que fue todo un acontecimiento social y deportivo,
como reflejó el también recordado Berto en las páginas de La Provincia.
Aun siendo una competición social, la respuesta la han dado los que
abrieron este 'Master'93', y que fueron Beatriz Pulido, Ely M. Ramos, Saro Lang-Lenton,
Nancy Fleitas, Estrella Gutiérrez, Fayna Pírez, Josefa Domínguez, Bernarda
Angulo, Mercedes Massanet, María J. Fortum, Ana Ma Martín, Rita Pulido, Carmelo
Hernández, Ignacio Funes, Javier Medina, Jesús Hermana, Sebastián Abrante, Juan
M. González, Fernando Alamo, Guillermo Martinón, Enrique Caballero, Guillermo
Caballero, Arturo y Jorge Lang- Lenton, Juan M. Winter, Antonio Benítez,
Heriberto de la Fe, Manuel Castiñeira, Mario Viera, Eduardo López, Francisco
Bello, Roberto Alberiche, Francisco Reyes, Antonio Manchado, Antonio Antela,
Juan García y José M. Emperador.
Berto , La Provincia, 11/6/1993
En
la actualidad la natación máster ha tenido un desarrollo que ha sido
espectacular y la categoría ha llegado a unos niveles de gran prestigio
deportivo y popular y aunque se nutrió en los primeros años de nadadores
procedentes de la playa y los de la piscina, todos de alguna manera, veteranos
o “viejas glorias” de la natación, ahora ya no es necesario haber sido nadador en
otras épocas para participar en los Máster y eso, si bien es verdad que para
unos ha sido un éxito, debido al magnífico ejemplo dado por todos aquellos
nadadores que abrieron el camino para que mucha gente se uniera a esto de la
natación, para otros, más románticos, ya no es lo mismo, ya que piensan que se
ha perdido aquel espíritu de camaradería y solidaridad de los orígenes.
Cuestión de opiniones.
domingo, 14 de junio de 2015
LA SECCIÓN DE NATACIÓN DE LA UNIÓN DEPORTIVA LAS PALMAS Y SU BRILLANTE PRESENCIA NACIONAL (1971-1972)
Arriba; Bartolome "Tato" Apolinario; Jose Ferrero; Juan Francisco Rodriguez; Jaume Ristoll, Rafa Reyes y Jose Mª Vela Hidalgo. Delante: Nuria Brisson; Alberto Merelles, Teresa Devesa, Raul Beltra, Eduvigis Martín, Lourdes Auyanet, Manuel Suarez y Miguel Torres.
En el año 1971 del siglo pasado y en plena resaca europea, los Campeonatos de
España de Verano se disputaban en las históricas piscinas “Picornell” y allí empezó
a consolidarse a nivel nacional el fenómeno UDLP de la mano de Miguel Torres, que traía
consigo un brillante historial deportivo, y que había sido el primer medallista
español en un Campeonato de Europa, en Leipzig 1962, en la prueba de 1.500
libres, y que tomaba así la alternativa como entrenador junto con su esposa, la
también campeona María Ballesté. Y no defraudó.
En ese campeonato se alcanzaban los títulos de campeones de España para Pepe Ferrero por partida doble y Rafa
Reyes, y los puestos de honor para Manolo Suarez, segundo en 200 libres y
Margaret Hefti, tercera en 200 y 800
libres y segunda en 200 mariposa y cuarto puesto en la clasificación final por
clubes masculina y sexto en féminas.
El tema ya se había iniciado en los de invierno en
Palma de Mallorca, en las flamantes instalaciones ya desaparecidas del C.N.
Palma, donde la U.D. Las Palmas era tercera superando al Metropole que era
quinto en masculinos, mismo puesto que alcanzaban las pupilas de Miguel en
féminas, que ya se habían dejado notar, para alegría de todo el mundillo de la
natación que veían como otro club canario se subía al carro de la elite
nacional.
El éxito se basó en la aportación de Ferrero, Reyes,
Suarez, Apolinario, José Luis Núñez, Paco Cáceres, Alberto Merelles y Raúl
Beltra (justo antes de su aciago accidente), y en chicas con Eduvigis Martín,
Teresa Devesa, Margaret Hefti, Ana Mª Jiménez, Lucía Sánchez y Lourdes Auyanet
que ya preparaban el “asalta al título” del año siguiente.
La U.D. se subía al podio en la espalda masculina con
bronce en 100 y 200 para Reyes; Margaret
Hefti en 400 libres; Ferrero, plata en 200 estilos y más bronce en el 4 x 100
estilos con Reyes, Ferrero, Apolinario y Suarez
y en el 4 x 200, con Suárez, Merelles, Apolinario y Ferrero y en el 4 x
100 libres femenino, con Hefti, Devesa, Brisson y Martin.
Pero sin duda alguna el campanazo del año 1972 se dio en los Campeonatos de Invierno
disputados en Granollers, dónde la Unión Deportiva, se alzaba con el título
nacional en féminas y segundo en masculinos, para sorpresa de todo el mundo,
siendo segundos en la clasificación final conjunta, lo que se denominaba Trofeo
Picornell.
El titulo más sonado fue, sin duda, en los relevos, del
4 x 100 libres femenino que cerraba el campeonato con record de España absoluto
y todo formado por Eduvigis Martín, Teresa Devesa, Nuria Brisson y Margaret Hefti, y que también eran plata en
el de estilos con, Margaret, Lourdes Auyanet, Nuria y Eduvigis.
Y en chicos, la Unión Deportiva se volvía a lucir con
el tercer puesto en estilos, formando con Reyes, Ristol, Apolinario y Ferrero,
y plata en el 4 x 200 con Suarez, Apolinario, Merelles y Ferrero y además
también hubo puestos de honor para Eduvigis Martín, Jaume Ristol, Ferrero y
Margaret Hefti, en otras pruebas.
En verano siguió la racha en esta ocasión con el Club
Natación Metropole como sede del Campeonato de España de Verano y en el que la Unión
Deportiva, se proclamaba subcampeón de España en ambas categorías, dejaban
bien alto el pabellón isleño, con títulos para Margaret Hefti en 400 y 800 libres, para la nueva incorporación, el bracista catalán, Jaume Ristol que se imponía en 200 braza y con Nuria
Brissón que dominaba las dos pruebas de mariposa.
Lo dicho, fue una brillante irrupción de una natación “made
in Canarias”, diferente a la clásica presencia del Metropole y que se había
gestado modestamente en la histórica “Julio Navarro” recogiendo gran parte de los frutos de la labor de cantera
desarrollada en los años precedentes por José Ojeda y una larga lista de
monitores y colaboradores
Pero en aquel momento, Miguel supo conducir el equipo y dar así
una alegría, antes que nada a los nadadores,
a los aficionados y a los dirigentes que habían apostado por él, y dar
un revulsivo a la natación local.
sábado, 13 de junio de 2015
EL VERDADERO MERITO DE JULIO NAVARRO
Al
hilo de la conmemoración del Día del Club que organizaba en fechas pasadas el Club Natación Metropole en las que se conmemoran las Bodas de oro de sus
instalaciones, aquellas que se
inauguraban con aquel brillante e histórico encuentro internacional España-Italia y que ganaba el equipo hispano
por un solo punto, nos parece interesante repasar una vez más la aportación que
ha hecho esta entidad y sobre todo su fundador, Julio Navarro Jaimez, a la
natación canaria, nacional e internacional, al deporte en general y a toda la sociedad canaria.
A Julio Navarro se le atribuye ser el fundador
de la natación canaria cuando, repasando la historia de nuestra natación canaria,
hemos podido comprobar que en aquel año 1934, cuando se crea el Club Natación
Metropole, la natación en Canarias ya
tenía su pequeña historia desde principios del siglo XX, siendo su máximo
representante el Club Natación Canteras,
que presidiera Josefina de la Torre a finales de los años veinte en
aquella zona capitalina que convocaba a los amantes del deporte de agua.
Y es
precisamente allí donde nació para la natación Julio Navarro Jaimez, que al
parecer acudía a la playa por prescripción médica, pero que quedó definitivamente
enganchado a la natación hasta el punto que cuando viaja a Madrid por estudios
descubre el recién constituido Canoe Natación Club y se da cuenta que el futuro
pasa por crear algo parecido en Canarias y ahí surgió la idea del crear un
club.
Una
idea que le rondaba por la cabeza y que se traía de vacaciones a Las Palmas
junto con otros compañeros como Faustino Cordón, dejando embobados a los amigos
playeros que practicaban una natación poco moderna, a tenor de la que,
seguramente, Julio veía y practicaba en el club madrileño en la histórica
piscina madrileña de La Isla.
Julio
Navarro, convenció a sus compañeros playeros para formar un club que pudiera
competir mas allá de nuestras fronteras a imagen y semejanza de los que había
en la Península y así se funda en 1934 el Club Natación Metropole, aunque este
no estaba en Las Canteras, sino en Ciudad Jardín -aunque su origen fuera Triana- pero tenía un poderoso atractivo: una
pequeña piscina de 20 metros, el famoso Lido, donde se les permitió un uso
deportivo en el tiempo libre, que utilizaron con entusiasmo los nadadores
playeros.
La
clave del perfeccionamiento técnico de Julio Navarro tuvo además otro factor
añadido, la presencia en Canarias del famoso nadador de los años 20 en España
el belga Paul Wenziner, que visitaba las islas asesorando y enseñando a los
precoces nadadores locales con un alumno aventajado, el propio Julio Navarro,
que después transmitía a la perfección estas enseñanzas a su compañeros de
playa.
Es
por eso que entendemos que el verdadero mérito de Julio Navarro fue
precisamente el dar a conocer la natación canaria al mundo, dar la oportunidad
para que esa natación local y modesta se asomara al exterior y abriera la
puerta a una historia de leyenda que llevo el nombre de la natación canaria, de
Las Palmas de Gran Canaria y de toda Canarias al exterior, paseándolo por toda
España y por el mundo, llenando páginas brillantes en los anales del deporte
hispano y además contribuiría con su faceta de periodista, informando
minuciosamente de todo lo que concerniera a la natación no sólo local, ya que fue corresponsal de la
revista del Canoe madrileño, “Aguaisol” y además lo hizo en los Juegos
Olímpicos de Berlín del año 1936.
Ese
creemos que fue el verdadero merito de Julio Navarro y por el que ha pasado a
la historia, una historia tristemente truncada por su prematuro fallecimiento.
domingo, 1 de febrero de 2015
EN RECUERDO DE LA GRADA CURVA
El viejo Estadio Insular lo están desmantelando y lo están
haciendo a cachitos, poco a poco van desmontando las zonas históricas y
sentimentales que han quedado en el recuerdo de los que tuvieron la suerte de
vivir aquellas época.
La Grada Naciente, la
General Numerada; la Preferencia sin numerar, la Preferencia numerada,
la Tribuna y como no, la Grada Curva.
Esta imagen es la que se puede ver estos días de lo que va
quedando de aquel rincón del estadio.
Un rincón que nos recuerda aquellas históricas tardes de
sábado, esperando el comienzo del partido.
Allí estaban los que iban desde las cinco de la tarde cuando
se abrían las puertas (el partido empezaba a las 7 y media), para coger sitio a
los compañeros.
Los que iban a pasar la tarde con meriendas que iban desde
el bocadillo hasta jareas asadas y sus
partiditas de baraja.
Los que siempre llegaban a ultima hora y había que
rodar toda la fila para que pudieran
“encajar”.
Cada uno tenía su zona y no hacía falta ni números ni
acomodador, y algunos ni entrada porque allí estaban los que entraban con
pases.
Todo eso merecía la pena por el espectáculo que se veía
después en el césped.
Aquello era futbol de altos quilates, tanto que hasta le gustaba a los que no eran
aficionados al futbol. Le gustaba a
todos.
Cuando todos los partidos se jugaban los domingos la U.D.
Las Palmas, también abrió el camino a eso de jugar los sábados y a lo de la
iluminación artificial en los campos
Lo que ahora se conoce como el “tiki-taka” ya lo hacía la
U.D. Las Palmas en aquellos años, lo que
pasa es que no se llamaba así. Se conocía mas bien por aquello de: “juego raso”
“al primer toque” y “sin pinguear”(más moderno regatear).
Y como muestra aún queda en la retina aquel magnífico gol
que le marcaba Quique Wolf al Celta de Vigo, en estrecha colaboración con
Germán, elaborado desde el centro del
campo con esas premisas, primer toque raso y pasando el balón sin
regatear, que además fue temprano, con luz natural y decisivo para no descender
Y si hacía falta “preparación física”, seguir los consejos
de los veteranos, que también se adelantaban a eso de la Nutrición Deportiva. (“Inyecciones
de papas con carne” como se oía gritar en el sector del marcador simultaneo en
la esquina lateral, otro reducto histórico).
Y desde aquella Grada Curva muchos fueron testigos de unas
tardes inolvidables, con una bonita vista panorámica, que incluía el reloj de
la fábrica de tabaco, Fedora, que no funcionaba casi nunca, las banderas de los
equipos en lo alto de la grada de pie -la más barata- y más a lo lejos, la bahía de Las Alcaravaneras,
sin olvidar la “Loma Ingeniero Salinas”, que estaba detrás, el “tendido de los
sastres” que decían los aficionados taurinos y que ahora está casi todo ocupada
por nuevas construcciones.
Pero no solo fue futbol, ya que esa Grada Curva sirvió de
escenario parta otros muchos eventos deportivos y no deportivos.
Aun resuenan los ecos de aquellas magnificas veladas de
Boxeo, (con guantes de 6 onzas y vendaje duro), cuando Canarias era un todo un
referente de este deporte, y que
ocupaban sobre todo muchas noches de sábado.
Después vino lo de los Carnavales y las Murgas, los mítines
políticos, y otras muchas cosas, que han marcado este espacio para el recuerdo
de muchos habitantes de esta tierra.
Por eso ahora que la vemos así, desnuda desde la calle, no
podemos menos que recordar aquellos momentos históricos alegres y tristes, que
hubo de todo, pero de los que la Grada
Curva fue fiel testigo y que quedara en la memoria de los amigos del deporte canario.
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